El placer de no trabajar.
y no morir en el intento. Imagina esto: estás emprendiendo tu propio negocio, lleno de expectativas, pero el peso de la responsabilidad, las largas horas y la incertidumbre te han llevado a un punto de agotamiento. El estrés en los emprendedores es real, y más común de lo que parece. Pero, ¿y si existieran formas…